A raíz de la pandemia de COVID-19, han surgido diversos cambios y disrupciones en muchos sectores de la actividad humana, siendo la educación uno con impacto mayor, ya que, por seguridad hubo un cierre total de los centros educativos en todo el mundo. La nueva modalidad, educación a distancia, también llamada virtual, ha sido una solución en época de confinamiento. La pandemia de COVID-19 se ha convertido en un catalizador para que las instituciones educativas de todo el mundo busquen soluciones innovadoras en un período de tiempo relativamente corto.
Ahora, después de más de un año de confinamiento, se observa que varios países han hecho que sus estudiantes vuelvan a las clases presenciales, bajo estrictos protocolos de bioseguridad para evitar contagios, sin embargo; la educación virtual no ha dejado de funcionar ya que este retorno se está realizando de forma gradual, de tal manera que hoy en día existe un regreso a clases hibrido ya que combina ambas modalidades para realizar una constante enseñanza.
Los sistemas presenciales tendrán la oportunidad de evaluar con rigor y objetividad lo que se ganó y lo que se perdió en los tiempos de confinamiento total, así como las diferencias en la calidad de los aprendizajes adquiridos según zonas geográficas, instituciones, docentes, metodologías, sincronía, asincrónica, etc. No se sabe durante cuánto tiempo, pero habrá que convivir con estas nuevas formas de enseñar y aprender.
La cuestión es; ¿qué sucederá con la educación virtual una vez que la pandemia acabe? diversos expertos como Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el Foro Económico Mundial y la consultora McKinsey opinan que esta modalidad tiene una creciente tendencia y permanecerá en nuestras vidas con un mayor desarrollo. Según (CEPAL)[1] elevó su estimación de crecimiento promedio para la región en 2021 a 5,2%, de personas que se ha inscrito bajo la modalidad virtual para la realización de e-learning, haciendo que los maestros se replanteen nuevas metodologías educativas. Sin embargo, esta modalidad también trae problemas consigo ya que de solo realizar este tipo de enseñanza aquellas personas que no tienen los recursos necesarios se verán limitados de recibir la educación que merecen, por lo cual es necesario cuestionarse sobre este tipo de enseñanza ya que de continuar con esta la población vulnerable necesitara recibir apoyo económico para evitar quedarse atrás con esta tendencia.
En conclusión, es importante que los
gobiernos inviertan de manera eficiente para mejorar la calidad del sistema
educativo ya sea de manera presencial o virtual ya que ambas necesitan un apoyo
para que este a disposición de todos los interesados en aprender.
[1] CEPAL -Comisión Económica para América Latina y el Caribe
Referencias:
Educaweb. (15 de 09 de 2020). Educaweb. Obtenido de ¿Cómo será la educación cuando acabe la pandemia?: https://www.educaweb.com/noticia/2020/09/15/como-sera-educacion-cuando-acabe-pandemia-19298/
Foglia, G. (26 de 12 de 2020). Universidad de Palermo. Obtenido de La educación a distancia post pandemia: los cambios que llegaron para quedarse: https://www.palermo.edu/up-en-los-medios/educacion-a-distancia-post-pandemia.html
Lorenzo García Aretio. (2021). COVID-19 y educación a distancia digital: preconfinamiento, confinamiento y posconfinamiento. España.